Soy la clase de chica que no necesita un novio nuevo cada año, cada mes o cada día.
Soy del tipo que solo tiene tres grandes amores a lo largo de su vida.
Confieso que siempre amaré a mi primer amor, aunque fuera solo un amor de niños porque era el mas inocente, puro e incondicional.
Confieso además, que sigo amando a mi amor de adolescente porque fue el más doloroso, desgarrador e iluso.

Y confieso también que sé que falta uno, él más importante, el más frágil, placentero, el más perfecto.
Así que cuando el mundo me pregunta como es posible que a los 18 no exista alguien que me importe, silencio a mi corazón.
Sé que él hace lo mismo en cualquier lugar del mundo, porque él esta preparándose para encontrarme en los brazos de otra y yo esperando a que él me enseñe que todo será diferente porque faltaba yo.
Ya llegara el momento en que encaje a la perfección, mientras tanto, el sol sigue saliendo cada mañana y la noche es más brillante cada hora.
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